Los veterinarios del hospital donde el gato de ocho años vive, nunca han sido forzados a decir que el felino no es normal, simplemente es feo. Afirman que el animalito lleva la belleza por dentro y muestra una excelente predisposición.El gato se ha convertido en una atracción turística en Exeter, New Hampshire. ‘‘La gente viene y se toman fotos con las cámaras del celular’’, afirma Christie Hartnett, miembro del staff del hospital.


No hay comentarios:
Publicar un comentario