Según el investigador policial Oleg Lobach, para deshacerse del cuerpo de Tatiana fue ayudada por su amiga Julia, que, al parecer, actuó bajo amenazas. Entre las dos la llevaron al sótano.
Volvimos a bajar al sótano porque Julia decía que se había quedado con hambre y quería comer algo más", relató a la Policía la asesina confesa. "Hicimos filetes y volvimos a la cocina para asar otro poco". En este caso agarraron carne de las nalgas, el pecho y una mejilla de la víctima. Lo que sobró lo enterró en el jardín. Julia contó a la Policía que ella ayudó a Olesya para que no la matara a ella también, ya que le había amenazado.
"Los vecinos alertaron a la Policía porque vieron piernas humanas saliendo del cubo de la basura", afirmó el investigador Vadim Shastakov. "Después de peinar la zona y entrar en 50 casas, dimos con la casa donde se había cometido el crimen. Allí encontramos señales de sangre en el suelo y los restos de la chica esparcidos por el jardín".
La joven de 27 años se enfrenta ahora a 15 años de cárcel por asesinato. Su hijo ha sido llevado a un centro de menores. Por otro lado, la Policía ha confirmado que Julia declaró como testigo y no como sospechosa. Se trata del tercer caso de canibalismo ocurrido en Rusia en los últimos seis meses.
En enero, una joven de 16 años, Karina Barduchyan, fue 'comida' con papas por un chico de 21 años que regentaba una floristería en San Petersburgo. El pasado septiembre otro joven mató a dos adolescentes con un rito satánico y se las comió.
VISTO EN MISIONLANDIA
No hay comentarios:
Publicar un comentario